"El miedo es una de las emociones más antiguas, telúricas y poderosas que embargan al ser humano", aproximadamente esto dijo H.P. Lovecraft en su tiempo. Pues bien, el miedo al que alude el cine de zombis es el miedo a la pérdida de la identidad y de la propia conciencia (tanto en un nivel individual como colectivo). Algo que sin duda consideramos terrible seres como nosotros, tan sociales, y que necesitamos tanto de la ayuda, de la comprensión y sobre todo de la aceptación de los demás. Hay otra lectura de profundidad en el "mito zombi", y es que éste nos recuerda lo inevitable de la muerte: "sin remedio atados a nuestros cuerpos y de alguna manera con un pie en la tumba".
Contra lo que pudiera parecer el cine de zombis no lo inventó (o se lo sacó de la manga) George A. Romero (aunque su aportación es sobradamente conocida y magnífica, y hablaremos en otro capítulo sobre este director). La que puede considerarse primera película de zombis es una película de 1932 titulada en español "La legión de los hombres sin alma" ("White zombie", en inglés) del director Victor Halperin. Película que transcurre en la caribeña isla de Haití. ¿Por qué? Porque en el inicio del mito está el vudú. Los zombis eran muertos que "volvían a la vida" mediante las artes oscuras de los practicantes de vudú (los brujos). Por tanto su origen primero debe situarse en África, trasladada posteriormente su práctica más conocida a las islas del Caribe, merced a los masivos desplazamientos esclavistas. El responsable principal de la expansión de este conocimiento al resto del mundo, fue el periodista y escritor William Seabrook, que en 1929 publicó "La isla mágica", de la que arranca la película de Victor Halperin. Parece ser que en principio se utilizaba a estas criaturas (los zombis) como trabajadores para las tareas más pesadas, aunque la "zombificación" también podía ser un castigo por mal comportamiento en sociedad. En sí mismo, realmente parece un castigo peor que la propia muerte.
Volviendo a la película "La legión de los hombres sin alma", mencionar que el protagonista es Bela Lugosi (de la estupenda "Drácula", basada en la novela de Bram Stoker), que interpreta aquí a Legendre, una especie de brujo que ejerce un control total sobre los zombis para que trabajen en plantaciones y fábricas. Hay una segunda vertiente escabrosa en la película que es la de la "zombificación" de la protagonista femenina, llamada Madeleine (Magde Bellamy). Dicho proceso se lleva a cabo, y de esta forma Legendre puede controlar a la chica y entregársela así al hacendado, Neil (John Harron), que se ha enamorado de ella y la desea.
Os invito a que veáis la película completa a pesar de estas líneas que he esbozado. Merece mucho la pena. Seguiremos con la saga zombi.